viernes, 5 de octubre de 2012

El último rey de los ayleid

Los ayleid, o los altos elfos de las tierras centrales, gobernaron Cyrodiil en la época de los mitos, antes de los anales de la historia. Una de las fechas más antiguas de las que se tiene constancia es la caída de la Torre Blanca y Dorada, en el 243 de la Primera Era, hecho que, al parecer, marcó el fin de los ayleid.

A pesar de que el gobierno ayleid sobre Cyrodiil se interrumpió en el 243 de la Primera Era, solo fue uno de las etapas más obvias hacia un largo declive. Durante los dos primeros siglos de la Primera Era, las disputas aumentaron entre los grandes señores ayleid de Cyrodiil. Alessia parece haber aprovechado un periodo de guerras civiles para comenzar su insurrección. Tradicionalmente, los historiadores del Imperio han atribuido su victoria a la intervención de Skyrim, pero al parecer tuvo la misma ayuda de los señores ayleid rebeldes durante el ataque a la Torre Blanca y Dorada.

La imagen de creueles esclavistas que tienen los ayleid está basada en hechos, por supuesto, pero lo que no se conoce tan bien es que algunos príncipes ayleid siguieron gobernando partes de Cyrodiil después del 263, como vasallos de la nueva emperatriz de Cyrodiil. Esto sugiere dos teorías:
 que no todos detestaban el reinado ayleid, o que Alessia y sus sucesores fueron más pragmáticos de lo que se ha creído. O quizás un poco de ambas teorías.

De cualquier modo, las excavaciones realizadas en diferentes yacimientos ayleid muestran una ocupación continua e incluso una expansión durante el así llamado periodo ayleid tardío (243 - c. 498 de la Primera Era). Al principio, muchos de los señores ayleid siguieron gobernando como vasallos del nuevo régimen humano y, en algunos casos, seguidores ayleid de Alessia fueron recompensados con nuevas tierras tomadas de enemigos derrotados. No está claro hasta qué punto continuó la esclavitud bajo el Imperio cyrodílico. Los humanos siguieron poblando las tierras gobernadas por los ayleid, pero no se sabe nada concreto sobre las condiciones precisas en las que lo hacían.

Era una relación difícil que no estaba destinada a durar. El resentimiento provocado por la continua presencia de los nobles ayleid dentro del Imperio contribuyó a la creación de la llamada Orden de Alessia, fundada por Maruhk. Las primeras víctimas de los alessios fueron los ayleid de Cyrodiil. A principios del tercer siglo, las conmunidades ayleid que habían sobrevivido en áreas gobernadas por los humanos fueron eliminadas una a una, y los refugiados aumentaban temporalmente el poder de los señores ayleid restantes.

En el 361, los alessios consiguieron controlar el Imperio e implantaron las doctrinas alessias por todo su territorio. Los señores ayleid fueron eliminados. La implantación de este decreto no pareció requerir demasiada violencia directa, y da la impresión de que, llegado este punto, la balanza del poder estaba ya tan desequilibrada en su contra y sus destinos tan anunciados, que la mayoría de los ayleid restantes simplemente abandonaron Cyrodiil, mezclándose entre las poblaciones élficas de Bosque Valen y Roca Alta. Efectivamente, el apogeo de la hegemonía de los Direnni puede estar relacionado con este exilio de los ayleid de Cyrodiil (una conexión poco estudiada por los historiadores hasta ahora).

Aun así, parece que una pequeña parte de la población ayleid sobrevivió al mandato de los alessios, ya que nos consta que el "último Rey de los ayleid" se unió a la batalla de los páramos de Glenumbria, donde los Direnni derrotaron difinitivamente a los alessios en el 482. Se desconoce cómo los seguidores de este rey lograron sobrevivir al siglo anterior. Ni siquiera sabemos quiénes era, aunque recientes estudios señalan Nenalata como el sitio de descanso de este "último rey". Por desgracia, el estado económico actual del Imperio no permite otorgar subvenciones para la investigación científica que estas grandes ruinas precisan, así que dicha investigación se tendrá que dejar a generaciones futuras.

de Herminia Cinna

No hay comentarios:

Publicar un comentario